Este es un artículo breve ante la pregunta recurrente de ¿qué puede hacer la música por mí?
Los músicos se comunican mejor.
Los músicos usan todos sus sentidos para reproducir una
pieza musical: sienten y escuchan las melodías, marcan el ritmo,
observan a otros intérpretes para sincronizar sus instrumentos, leen los
labios, etc. Hasta ahora diversos estudios habían demostrado que tocar
un instrumento aumenta la memoria y el rendimiento en matemáticas. Pero
los efectos de la música llegan aún más lejos. Según publica la
revista PNAS, la transformación que experimenta el cerebro de los músicos gracias a este “entrenamiento multisensorial” también mejora las habilidades comunicativas orales y escritas, así como la lectura.
Los autores del estudio han comprobado que quienes tocan un instrumento
musical identifican con mayor facilidad a un interlocutor por su timbre.
Además, son más sensibles a las ligeras inflexiones del tono de voz,
interpretan fácilmente el significado de los movimientos labiales y
faciales, e infieren el estado emocional de sus interlocutores a partir
del ritmo de la conversación y los gestos.
Estas ventajas frente al común de los mortales tienen su base
fisiológica en el tronco cerebral, la parte más primitiva del cerebro
humano, dónde los músicos cuentan con un sistema neuronal especializado
para procesar imágenes y sonidos. Puesto que este sistema interviene
tanto en la interpretación musical como en el desarrollo del lenguaje,
los investigadores han llegado a la conclusión de que la alfabetización
de los más pequeños podría mejorar si tocan algún instrumento.
Para Gabriella Musacchia, coautora del trabajo, los resultados “ponen de
manifiesto la enorme maleabilidad de la función auditiva a través de la
música, y el poder de ésta para afinar nuestra respuesta neuronal frente al mundo que nos rodea”.
Fuente.
domingo, mayo 13, 2012
Suscribirse a:
Entradas (Atom)